No le hace mal a nadie...

¿Qué hacia allí? Era una buena pregunta, ya que debería estar adentro, preparando sus clases, pero sin embargo… Todos necesitaban distraerse con algo de vez en cuando, y el no era la acepción. Se sentó en el césped, a una considerable distancia del lago, mirándolo todo desde allí.

Se paseaba por Hogwarts, ya era el segundo día por allí y le parecia que todo el mundo estaba desaparecido. Lleva consigo esa alegria particular, como siempre. Sonrie animada al ver a su metamorfomago favorito allí, va hacía el sigilosa y le tapa los ojos, divertida y niña.

Sonríe, ese aroma… era inconfundible. A pesar de no haber heredado la licantropía de su padre, sus sentidos estaban más agudizados que los de un humano normal. – Señorita Potter, ¿no tiene nada mejor que hacer que molestar a su pobre profesor? – Bromea, tomando sus manos con las suyas y destapándose los ojos.

- Supongo que por ahora no - se burla, ya lo había felicitado unas seis veces por su empleo en el castillo. Se abraza a él - Te extrañe Ted! - le dice, aunque solmente hacía menos de una semana que no lo veia. Él era ya de la familia.

La abraza también, cálido, y le regala una sonrisa – Yo también te extrañe, enana. – Y era una gran verdad, le tenia demasiado cariño - ¿Y que tal la vuelta al castillo? – Pregunta, con cierta curiosidad, y a la vez un tanto nostálgico mientras recordaba sus propios años como estudiante.

- No soy enana! - se queja, sí, no eran tan alta como él pero no era enana. Escucha la pregunta - Aburrida, como siempre los primeros días - responde mirandolo - No encontre a nadie excepto a ti todavia - nisiquiera a las compañeras de cuarto aún, ¿Donde estaban todos?.

Ríe entre dientes, leve – Si lo eres – La molesta, en broma, claro. – Eso si que es raro – Comenta al escuchar su respuesta, en parte extrañado por eso. Ella tenia razón, no recordaba haber visto a los demás. Su cabello se oscurece cuando frunce el ceño, aunque solo un poco. Pero al parecer, no lo nota.

- O tu eres muy alto! - le recuerda, separandose apenas de él pero sin borrar su sonrisita. Sabía que todo era una broma. - Lo sé, pero deben estar en lo suyo y haberse olvidado de nosotros - exagera en broma con un puchero leve. Suelta una risita al ver el color de su cabello cambiar, recordando cuando ella le pedia que lo cambie de pequeña.

-O tal vez se esconden de nosotros – Susurra, en tono confidencial -¿Qué es tan gracioso? – Le pregunta, alzando una ceja, volviendo a su tono de voz normal. Rara vez no se daba cuenta de que cambiaba de aspecto, pero cuando se concentraba en sus emociones casi no lo notaba.

- No hay razones para esconderse de mi - bromea, con cierto deje egocentrico. - Solamente recordaba - responde al escucharlo, tomando un mechón del cabello de él y jugando con este - Me gusta como te queda el oscuro - le da a entender lo que pasaba, con una sonrisa dulce en su rostro.

-Oh, es eso. – suspiro, con una sonrisa ladeada – ¿Así es mejor que turquesa? - Pregunta, curioso ante lo que ella podría responderle. Hacia mucho ya que había dejado de usar aquel llamativo color de cabello, aunque aun seguía gustándole.

- El turquesa te queda de maravilla, Teddy - responde, siempre le había gustado aquel llamativo color en su primo. Mira el lago un momento - Quieres nadar un rato? - pregunta niña y divertida. Ella siempre buscaba con que meterse en líos.

Entrecierra los ojos, como si lo estuviera pensado seriamente - ¿Si digo que no, me arrastraras de todos modos? – Pregunta finalmente, con esa especie de de mezcla entre calma y un tanto de seriedad que lo identifica constantemente. Aunque en el fondo no le desagradaba la idea de nadar en el lago.

Abre la boca como para decir algo y la cierra, hace que lo piensa unos momentos - Si - responde luego - Y también interpretare eso como un 'Claro, enana' - se pone en puntas de pié para besar su mejilla y lo lleva con ella a la orilla del lago.

Asiente, volviendo a componer una sonrisa -Me conoces lo suficiente como para saber que tienes toda la razón – Ríe, dejándose llevar por ella hacia el lago. Sonríe un poco más, ante una idea que le viene a la mente, y una vez que ambos están lo suficientemente cerca de la orilla, la toma en brazos con rapidez y salta con ella al lago.

- Siempre lo hago - bromea, chilla cuando él la toma en brazos y salta al lago - Teeeeddy, eso no es justo! - se queja niña, aún en sus brazos. - No nos meteremos en líos por esto, profesor? - pregunta, sabía que así era. Pero ella actuaba como un iman para estos ultimos.

Le saco la lengua con un arrebato de niñez y su cabello se torno turquesa, como solía ser cuando era más joven - ¿Desde cuando a Lily Luna Potter le importa meterse en problemas? – Bromea, aunque realidad, dudaba que les digieran algo solo por estar en el lago.

- Desde que anda con un profesor adicto al chocolate? - bromea, a ella nunca le había molestado aquello. Y mucho menos andar con su Teddy, disfrutaba bastante de su compañia - Ya planeaste las clases? - pregunta cambiando de tema, tipico en ella.

Rueda los ojos – Mi adicción no tiene nada que ver con tu reciente interés en ser correcta y no meterte en líos – Se defiende con aquella tonta escusa – Hmm, si, algo así, quizás falta arreglar alguna que otra cosa. – Responde, haciendo una leve mueca.

- Seeeeeeee, claro Lupin! - musita - Me llevas a nadar a caballito? - pregunta niña, él era como un hermano mayor, o quiza más para ella. Y todos los Potter-Weasley y demases siempre la habian malcriado, como habían hecho entre sí. - Seguro sera buena - murmura, no lo dudaba de él.

-Eso tendremos que verlo – Se encoge de hombros, refiriéndose a sus clases. Se da vuelta, dándole la espalda y la mira por sobre su hombro, siempre sonriendo – Sube, enana. – Por alguna razón, no podía negarle nada a ella. Quizás fuera porque la quería demasiado, o porque se divertía al hacerlo.

- No lo dudes! - tenía más confianza en él seguramente, que él mismo. Se sube a su espalda, ella era delgada, tal vez un poco más de lo que deberia. - Lisssssto - exclama, niña.

-Si tu lo dices. – Murmuro. Le agradaba que confiara tanto en el--¿Estas más delgada o solo es mi impresión? – Frunció el ceño, aún mirándola por sobre su hombro. Comenzó a desplazarse, con bastante facilidad.

Sonrie más complacida, él ya lo veria - No, estoy perfecta. Solo es tu impresión - responde, ella no se fijaba en esos detalles.. menores. Apoya el menton en su hombro, mirando el lago con un semblante tranquilo.

Continua nadando, calmo y sin hacer demasiado ruido. La ropa mojada comenzaba a molestarle un poco, peros seguía despezándose, como si nada, casi sin notar el peso de Lily sobre el suyo.

Cierra los ojos, dejando que él la lleve por el lago - Teddy, tienes novia? - pregunta, al recordar que debía hacerlo y ponerse celosa si asi era.